La construcción de relaciones y la creación de ambientes de apoyo
Guía del presentador
El Centro sobre los Fundamentos Sociales y Emocionales para el Aprendizaje Temprano es un centro nacional que se enfoca en el fortalecimiento de la capacidad de programas de cuidado infantil y de Head Start para mejorar el desarrollo social y emocional de niños pequeños. El Centro cuenta con el patrocinio partícipe de la Oficina de Head Start y la Oficina de Cuidado Infantil (Head Start and Child Care Bureaus) del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU.
Los siguientes principios-guía relacionados con el fomento del desarrollo social y emocional de niños pequeños, fundamentan las obras del Centro:
En relación con estas actividades, el Centro ha desarrollado módulos de capacitación basados en evidencia y fáciles de utilizar, para ayudar a educadores de niños pequeños a fomentar el desarrollo social y emocional de los niños y a tratar el comportamiento difícil y las necesidades de salud mental de los niños en guarderías y programas de Head Start . El diseño de estos módulos se basa en las contribuciones de grupos de enfoque integrados por administradores de programas, proveedores de capacitación y asistencia técnica, educadores de niños pequeños y familiares respecto a la forma y el contenido de la capacitación que fuera más útil para tratar las necesidades social-emocionales de niños pequeños. Esta es la tercera edición de los Módulos. Las revisiones se basan en las contribuciones de proveedores de capacitación que los han utilizado en variadas situaciones, y en las contribuciones de profesionales del cuidado y educación de niños pequeños que han participado en sesiones de capacitación en las que utilizaron estos materiales. El contenido de los módulos es compatible con las prácticas basadas en evidencia que se identificaron durante una reseña cabal de la literatura. La Figura 1 ofrece una representación gráfica de un modelo para el fomento del desarrollo social-emocional de los niños y la prevención del comportamiento difícil.
[Pirámide: de arriba para abajo]
Intervenciones individualizadas intensivas
Estrategias social-emocionales de enseñanza
El diseño de ambientes de apoyo
La construcción de relaciones positivas
Figura 1. La Pirámide de Enseñanza: Modelo para el fomento del desarrollo social-emocional de los niños y la prevención del comportamiento difícil. Fox, L., Dunlap, G., Hemmeter, M. L., Joseph, G. & Strain, P. (2003). The teaching pyramid: A model supporting social competence and preventing challenging behavior in young children. Young Children , 58 (4), 48-52
El modelo representado en la Figura 1 ofrece un sistema conceptual para describir los cuatro estratos entrelazados de prácticas que tratan el desarrollo social y emocional de todos los niños. Este sistema conceptual, La Pirámide de Enseñanza, se describe más plenamente en el artículo correspondiente de Young Children que puede hallarse en el Módulo 4 (Hoja 4.7). La Pirámide de Enseñanza está diseñada para guiar al profesional de modo que entienda la importancia de la competencia social y emocional de niños con respecto a su preparación escolar y a la prevención del comportamiento difícil. Uno de los enfoques importantes del contenido de los módulos consta de las estrategias que los educadores de niños pequeños podrían utilizar para fomentar el desarrollo infantil. Además del enfoque en la prevención y el fomento, incluimos métodos para el uso de equipos en el desarrollo de planes individualizados para niños que manifiestan comportamientos difíciles persistentes. Definimos el comportamiento difícil como cualquier patrón repetido de comportamiento que interfiere o corre riesgos de interferir con el aprendizaje óptimo o la participación en interacciones pro-sociales con compañeros y adultos. Mientras que algunos comportamientos difíciles infantiles son normales para su desarrollo y se tratan efectivamente con la vigilancia de los adultos y el uso de procedimientos apropiados de guía, los materiales de los Módulos se enfocan en identificar prácticas basadas en evidencia que traten con comportamientos difíciles que persisten o que no responden a esos métodos. Las descripciones comunes de tales comportamientos incluyen berrinches prolongados, agresión física y verbal, respuestas vocales y motoras perturbadoras (por ej., gritar, la estereotipia), destrucción de propiedad, lastimarse a sí mismo, desobediencia y retiro.
En el caso de bebés y niños de 1 y 2 años de edad, el comportamiento difícil tiene que considerarse dentro del contexto de la relación entre el niño y los cuidadores. El comportamiento difícil podría manifestarse como dificultades de formar lazos emocionales, dificultades de sueño y alimentación, el llanto excesivo y dificultades para calmarse. Los comportamientos difíciles podrían definirse como aquellos que interfieren con el desarrollo y mantenimiento de relaciones recíprocas, positivas y estimuladoras con el padre, madre o cuidador. El comportamiento difícil, como patrón de comportamiento, se nota al considerar la relación entre el niño y el adulto y las dificultades que se manifiestan en la interacción mutua. Estos comportamientos podrían resultar de factores biológicos o ambientales que influyen en el desarrollo del lactante y, como consecuencia, en su relación con un cuidador; por otro lado, podrían guardar relación con condiciones (por ej., el cuidado negligente, la salud mental paterna, etc.) que afectan la capacidad del cuidador de establecer una relación estimuladora y sensible. Las prácticas que se utilizarían para cuidar a lactantes y niños de uno y dos años de edad, no son tratadas en estos materiales de capacitación. En cambio, estos se enfocan en prácticas utilizadas principalmente con niños entre dos y cinco años de edad.
Este modelo se fundamenta en el contexto de relaciones positivas de apoyo entre maestros y niños, así como entre las familias y otros profesionales (Módulo 1). Tales relaciones son esenciales para la implementación de prácticas efectivas para apoyar el desarrollo social-emocional infantil. El estrato siguiente del modelo demuestra la importancia de diseñar ambientes que fomenten el éxito de los niños al hacerlos participar en actividades significativas, enseñarles las expectativas del ambiente e implementar un horario predecible que haga participar a cada niño (Módulo 1). Las prácticas preventivas para las clases incluyen el diseño de ambientes físicos que apoyen el desarrollo y el uso de comportamientos apropiadas y habilidades sociales, la oferta de materiales apropiados al desarrollo que fomenten la participación de los niños, la instrucción acerca de las reglas y expectativas y el uso de atención positiva para animar al comportamiento pro-social. Los dos estratos de prácticas presentados en el Módulo 1 aseguran que la mayoría de los niños aprenderán el comportamiento social apropiado y tendrán un desarrollo emocional floreciente. Es importante señalar que la investigación indica que los primeros dos estratos de la Pirámide de Enseñanza son absolutamente esenciales para todos los niños, aunque algunos necesitarán estrategias adicionales sistemáticas y enfocadas para apoyar su desarrollo social y emocional. El tercer estrato de la Pirámide de Enseñanza trata la necesidad de tener maneras sistemáticas para ayudar a los niños a hacerse competentes en el ‘alfabetismo emocional’, la resolución de problemas, el control de los impulsos y las habilidades de amistad. En muchas situaciones de cuidado grupal, puede esperarse que el 30% de los niños necesitará intervenciones de este estrato (es decir, estrategias de enseñanza social y emocional) para desarrollar estas habilidades esenciales. En situaciones donde un número desproporcionado de niños proviene de ambientes de alto riesgo, un porcentaje mayor de niños necesitará instrucción enfocada para desarrollar la competencia social. El Módulo 2 ofrece información sobre la implementación de estrategias efectivas de enseñanza social-emocional (el tercer estrato de la Pirámide de Enseñanza). Estas estrategias se utilizan para enseñar habilidades importantes, tales como la expresión apropiada de emociones, la resolución de problemas y la formación de amistades.
El estrato final del modelo está diseñado para aquellos niños que siguen exhibiendo comportamientos difíciles significativos u otras necesidades social-emocionales cuando los demás estratos del modelo ya han sido establecidos (Módulos 3a y 3b). Cuando se ha implementado la Pirámide de Enseñanza, una cantidad pequeña de niños tendrá comportamientos difíciles que no responderán a los estratos fundamentales de la pirámide. Estos niños quizá tengan retrasos del desarrollo, estén expuestos a múltiples factores de riesgo (por ej., la pobreza, hogar monoparental, atención médica inadecuada) o hayan sido expuestos a otros eventos o influencias que han afectado su desarrollo social. Se apoya mejor a los niños que persisten en la manifestación de comportamientos difíciles, mediante métodos intensivos e individualizados que se enfocan en la identificación de los factores ambientales que se relacionan con el comportamiento difícil, el uso de estrategias de prevención diseñadas para el niño individual a fin de apoyar su comportamiento apropiado y la instrucción sobre nuevas habilidades para reemplazar el comportamiento difícil. Los Módulos 3a y 3b presentan instrucción sobre el uso del proceso “Apoyo del Comportamiento Positivo” para tratar las necesidades de niños que manifiestan comportamientos difíciles intensos y persistentes.
El Módulo 4 ofrece capacitación sobre los apoyos y procesos administrativos que se necesitan para adoptar y mantener las prácticas descritas en los primeros tres módulos de capacitación. Los módulos reflejan un compromiso para fomentar el desarrollo social-emocional de todos los niños. Además, los módulos abarcan información sobre intervenciones más intensivas que se necesitan cuando algunos niños tienen necesidades social-emocionales considerables o comportamientos difíciles intensos. La importancia de colaborar con las familias y de formar equipos se entreteje con los cuatro temas principales relacionados al apoyo del desarrollo social-emocional infantil y a la prevención del comportamiento difícil.
Cada Módulo se ha diseñado para el uso durante un día completo de capacitación interna para educadores practicantes de niños pequeños, profesionales que ofrecen servicios relacionados y administradores de programas. El contenido de los módulos de capacitación ofrece información a programas para niños pequeños, sobre cómo implementar una gama amplia de prácticas basadas en evidencia y esenciales para apoyar el desarrollo social y emocional infantil. Una característica notable de los módulos es el Inventario de prácticas para fomentar la competencia social. El inventario representa una herramienta de auto-evaluación para el personal de programas a fin de guiar la auto-reflexión y la identificación de las necesidades del programa. El inventario abarca un plan de acción que puede utilizarse para especificar aspectos del programa que necesitan mejorarse y para identificar los recursos y apoyos que se necesitan para asegurar la implementación de las prácticas identificadas.
El Inventario de prácticas y plan de acción para fomentar la competencia social y emocional se utilizará junto con todos los módulos; por lo tanto, será importante repasarlo con los participantes. Los siguientes puntos deben recalcarse al repartir el inventario:
La siguiente sección ofrece un repaso general de cada módulo junto con los temas principales que se discuten.
Este módulo describe estrategias para prevenir el comportamiento difícil. El módulo se basa en los siguientes principios:
a) Las relaciones positivas con niños son fundamentales para tratar sus necesidades social-emocionales.
b) Cuando los niños comprenden las rutinas y las expectativas para su comportamiento, y cuando están participando en actividades significativas, es menos probable que experimenten comportamientos difíciles.
c) Las expectativas y rutinas deben ser enseñadas utilizando una variedad de estrategias instructivas.
Temas incluidos en este módulo:
Un papel importante para el maestro de niños pequeños es el de facilitar el desarrollo social-emocional de los niños de modo que tengan las habilidades fundamentales que necesitan para lograr el éxito en la escuela. Este fundamento incluye la capacidad de resolver problemas, comunicar sus emociones apropiada y efectivamente y formar amistades. Este módulo se enfoca en estrategias efectivas para enseñar estas habilidades a los niños.
Temas incluidos en este módulo:
Los comportamientos difíciles infantiles frecuentemente sirven para expresar algún sentimiento, necesidad o significado que el niño es incapaz de comunicar de una manera apropiada. Esto sugiere la necesidad de identificar ese significado y las habilidades que necesita el niño para comunicarse más eficazmente. Este módulo se enfoca en las estrategias efectivas para observar a niños e identificar el significado de su comportamiento a fin de identificar las habilidades específicas que necesitan enseñarse al niño.
Temas incluidos en este módulo:
Después de discernir el significado del comportamiento difícil de un niño y las habilidades que necesita aprender para comunicar ese significado más efectivamente, se desarrolla un plan para apoyar al niño en el uso de las nuevas habilidades y para disminuir la probabilidad de que necesite utilizar el comportamiento difícil. Este módulo trata:
a) las estrategias para enseñar las nuevas habilidades y arreglar el ambiente de modo que apoye los comportamientos apropiados e impida el comportamiento difícil, y
b) la formación de equipos de profesionales y familiares para apoyar efectivamente el comportamiento del niño en varias situaciones.
Temas incluidos en este módulo:
El grado de implementación de las prácticas descritas en los primeros tres módulos dependerá mucho del apoyo administrativo. Este módulo se enfoca en la identificación de barreras para el uso efectivo de estas prácticas y en estrategias para hacer frente a tales barreras. La planificación cooperativa representa una característica esencial de este módulo.
Temas incluidos en este módulo:
Los módulos se diseñaron para ser usados con una variedad de públicos dentro del ámbito del cuidado y educación de niños pequeños, incluyendo las guarderías, las escuelas públicas y los programas de Head Start. En muchos casos, el término “maestro” describe a aquellos individuos que trabajan directamente con niños. Creemos firmemente que todos los individuos que trabajan con niños hacen una labor docente. No tenemos la intención de excluir a nadie con el uso de dicho término.
Aunque estos módulos están destinados al uso con variados profesionales, será importante refinar la capacitación y adaptarla a sus estudiantes en particular. Usted tal vez descubra que puede cubrir ciertos módulos más rápidamente con estudiantes muy experimentados, o que necesita tomar más tiempo para enseñar a estudiantes con menos experiencia. Lo animamos a tomar en cuenta las necesidades de su audiencia y a hacer las revisiones que sean necesarias.
Cada módulo de capacitación contiene las siguientes secciones:
Notas del presentador: Las notas del presentador ofrecen descripciones detalladas del contenido de cada módulo. Estas notas se proponen guiar al presentador en cada tema que se trata en el módulo. Las notas ofrecen descripciones detalladas del contenido y de cada actividad. Además, se incluyen ejemplos, viñetas e ideas para generar la discusión o responder a los posibles comentarios o preguntas de los participantes.
Iconos. Los iconos le ofrecen a usted, el presentador, un indicio de cuándo deberá hacer que los estudiantes participen en discusiones en grupos pequeños y grandes, utilizar láminas del proyector de transparencias, mostrar vídeo clips y comenzar actividades. Las Hojas repartidas y los Vídeo clips tienen códigos numéricos.
PowerPoint (con código numérico) |
Vídeo Clips (con código numérico) |
Hojas repartidas (con código numérico) |
Actividad grupal |
Actividad que utiliza papel de una tabla grande |
Objetivos de aprendizaje: Cada módulo comienza con una lista de Objetivos de aprendizaje que se espera que los participantes hayan dominado al completar cada módulo. Estos objetivos deben repasarse con los participantes al principio de la sesión de cada módulo.
Temario sugerido: Cada módulo incluye también un temario sugerido que presenta los temas según su orden de presentación y la duración aproximada de cada actividad. Los plazos de tiempo se incluyen para ayudar al presentador a anticipar cuánto tiempo se necesitará para tratar cada tema, lo cual le permitirá planificar su presentación en consecuencia. No obstante, se anima a los presentadores a adaptar el temario de acuerdo con las necesidades y habilidades de los participantes respectivos de las sesiones.
Lista de materiales necesarios: Esta lista detalla los materiales específicos que se necesitarán para implementar las actividades descritas en cada módulo. Muchos materiales necesarios se incluyen con este conjunto de materiales de capacitación. Sin embargo, los presentadores necesitarán preparar o recoger otros materiales de antemano. Por ejemplo, algunos módulos requieren rotuladores y papel grande. Se sugiere que los presentadores examinen cuidadosamente todas las actividades de un módulo y se aseguren que tienen acceso a todos los materiales necesarios.
Paquetes / Hojas repartidas: Se provee para cada módulo una copia maestra de los paquetes para participantes. Una lista de estos paquetes se encuentra al principio de cada módulo. Se incluye en cada módulo un paquete con las láminas de PowerPoint que debe repartirse al comienzo de cada sesión. Por lo general, estos paquetes contienen una copia casi exacta de las láminas del presentador; no obstante, existen algunas diferencias pequeñas entre la Presentación de PowerPoint de cada módulo y el paquete de láminas, donde se quitaron las “respuestas” para varias actividades. Las láminas de PowerPoint pueden imprimirse con tres o seis láminas por página.
Inventario de prácticas y plan de acción para fomentar la competencia social y emocional: El Inventario y Plan de Acción se incluye como un paquete del Módulo 1; no obstante, está diseñado para el uso con todos los módulos. Se incluyen instrucciones para el uso del Inventario. El Inventario y Plan de Acción está diseñado para ser usado por participantes individuales para identificar y priorizar sus necesidades de capacitación. El Inventario y Plan de Acción puede completarse de antemano o durante las actividades de cada módulo. En la primera página de cada módulo se presenta una lista de paquetes adicionales específicos para ese módulo, tales como muestras de certificados, formularios vacíos para la recolección de datos y listas de estrategias.
Vídeo clips: Varios módulos incluyen vídeo clips que presentan ejemplos de los temas tratados. Se utilizan vídeos como parte de las actividades, para estimular discusiones con los participantes de las sesiones o para demostrar el contenido de la capacitación. Todos se incluyen en las láminas de PowerPoint que se hallan en el DVD o CD-ROM. También están disponibles en un videocasete VHS, donde están separados según el módulo y siguen el orden en que se presentan en los guiones del presentador.
A fin de tratar adecuadamente todos los componentes del modelo presentado en la Figura 1, el contenido de los módulos debe presentarse en secuencia durante cinco días. Los Módulos 1, 2, 3a, 3b y 4 necesitan un día completo de capacitación cada uno. Se incluye un Inventario de prácticas para fomentar la competencia social-emocional como un paquete para el Módulo 1 y se utiliza con todos los módulos. Este Inventario podría utilizarse para priorizar las necesidades de capacitación cuando no se cuenta con un plazo completo de cinco días.
Se debe animar a los participantes a asistir a la capacitación en grupos, a fin de desarrollar el apoyo para los participantes tanto durante la capacitación como mientras trabajan para implementar estas prácticas en sus programas. La cantidad de participantes debe tomarse en cuenta al momento de planificar la capacitación. Los módulos tienen varias actividades que exigen la participación de los estudiantes. Podría ser necesario presentar la capacitación de manera más o menos estructurada dependiendo del número de participantes. Además, muchas actividades exigen que los grupos pequeños trabajen y luego presenten un informe a todos los participantes. Si el grupo entero fuera tan grande que se pasaría mucho tiempo presentando informes, el presentador debería considerar o eliminar la tarea de informar al grupo o asignar a varios grupos pequeños la presentación de sus informes uno al otro.
Una consideración final es la necesidad de individualizar la capacitación para satisfacer las necesidades únicas y diversas de los participantes. Esta individualización puede realizarse de varias maneras. Primero, el presentador debería considerar la diversidad del grupo y asegurar que las actividades y los ejemplos se adapten para corresponder a las necesidades de los participantes. Segundo, el Inventario que se describe más arriba podría utilizarse para identificar y priorizar necesidades específicas de capacitación. Tercero, las actividades de reflexión podrían añadirse para que los participantes reflexionen sobre cómo poner en práctica el contenido con los niños y familias.
El desarrollo de estos módulos representa una labor verdaderamente cooperativa. Nos gustaría reconocer y agradecer a cada persona que contribuyó con el desarrollo, el diseño y la producción de los módulos:
El equipo de desarrollo incluyó a los autores de los módulos así como al personal del proyecto que coordinó el proceso general del desarrollo: Rob Corso, Tweety Yates, Mary Louise Hemmeter, Michaelene Ostrosky, Amy Santos y Dawn Thomas, de la Universidad de Illinois en Urbana-Champaign; Lise Fox, Glen Dunlap y Rochelle Lentini, de la University of South Florida; Matt Timm y Diane Dixon de Tennessee Voices for Children; Barbara Smith y Phil Strain, de la Universidad de Colorado en Denver, y Gail Joseph de la Universidad de Denver.
El diseño y la disposición visual de los módulos fue realizado por Pat Mayer de Champaign, Illinois.
Mark Landman, de PM Productions en Champaign, fue responsable por el desarrollo del vídeo. Otros miembros del personal apoyaron varios aspectos del desarrollo de los módulos: Deb Holderer, Marcia Siders, Amanda Quesenberry, Jill Thompkins, Greg Cheatham y Johnell Bentz, de la Universidad de Illinois en Urbana-Champaign y Jill Giacomini, de la Universidad de Colorado en Denver.
Berkeley Hinrichs realizó la traducción de los módulos al español, con la ayuda de Terrie Arrellano y Claudia Fabián.